Caminando distraída, a un paso tranquilo… Siento que el aire me acaricia la cara, mi cabello se mueve suavemente, respiro profundamente… y siento calma.
… por unos momentos creo que estoy flotando… Me siento invisible para la gente y mi cuerpo no tiene peso.
Sigo caminando con la mirada fija en un punto inconcreto, mientras siento que vuelo.
Sólo siento mi esencia, aquí y ahora, una esencia volátil, sutil, vertiginosa y amorosa. Mi alma, se ha tomado la libertad de salir de mi cuerpo… mientras camino.
Sin intención, sin pensarlo… por unos momentos … me sentí aire, y me fusioné con él.
Y esta maravillosa y extraña sensación… me hace pensar que sí, realmente todo está conectado.
La magia de sentir nuestro ser… puede transformarnos.
Mercè Boix
Ceboix – Mayo 2017